Tras la proclamación de la II República, en virtud de orden ministerial de 16 de junio de 1931 fue eliminada o adaptada la plantilla del personal de la ya extinguida Real Casa. En principio fueron eliminados todos aquellos empleos cuyos servicios eran de carácter suntuario o protocolario, así como los que pertenecían al servicio privado de la familia real y a la Real Capilla. También fueron eliminados de la plantilla todos aquellos que tenían otro empleo en el Estado y los mayores de 65 años. El resto fueron acoplados a los servicios creados o declarados en expectativa de destino. La estructura de la Casa del Presidente quedó fijada por la ley de 6 de diciembre de 1931 relativa a la organización de la Casa oficial del Presidente de la República. En ella se creaba una Secretaría General, a la cual quedaban adscritos todos los servicios de carácter civil dependientes de la Presidencia, y un Cuarto Militar